Cien años de soledad de García Márquez: resumen y análisis

Catalina Arancibia Durán
Revisado por Catalina Arancibia Durán
Máster en Literatura Española e Hispanoamericana
Tiempo de lectura: 12 min.

Cien años de soledad se ha convertido en la novela más emblemática de la literatura latinoamericana. Escrita por Gabriel García Márquez, esta obra se inscribió en lo que para unos es realismo mágico y para Alejo Carpentier es "lo real maravilloso".

En un exhaustivo trabajo de imaginación, narra la historia de siete generaciones de la familia Buendía, condenados a la soledad.

Resumen de Cien años de soledad

La novela está estructurada en capítulos sin nombrar. Sin embargo, para facilitar la comprensión del argumento, hemos ordenado y separado el relato en cuatro etapas que identifican, a grandes rasgos, los pasajes más emblemáticos.

I etapa: fundación y primeros años de Macondo

Desde que Úrsula Iguarán se casó con su primo José Arcadio Buendía, teme engendrar un niño con cola de cerdo como consecuencia del parentesco. Por ello, se niega temporalmente a consumar el matrimonio. Esto hace que Prudencio Aguilar se burle de José Arcadio, quien lo mata en un duelo para salvar su honor. Desde entonces, el fantasma de Aguilar lo persigue y el hombre decide irse del pueblo.

Inspirado por un sueño durante su travesía en la selva, José Arcadio Buendía opta por quedarse en ese punto del camino y fundar Macondo, pueblo que crece poco a poco.

El pueblo recibe con frecuencia las visitas de los gitanos. Su líder, Melquíades, trae siempre artefactos y objetos que obsesionan a José Arcadio Buendía.

Para entonces, el joven matrimonio ya ha concebido tres hijos: José Arcadio, Aureliano y Amaranta. Además, adoptan a Rebeca, la hija de unos parientes. El incesto es una preocupación constante en Úrsula, quien con los años observa cómo Rebeca y su hijo José Arcadio se enamoran y se casan.

A Macondo llega la peste del insomnio que trae consigo la del olvido. Un brebaje de Melquíades pone fin a la peste. El éxito es tal que el gitano se queda a vivir en Macondo y se dedica a redactar unos pergaminos que serán descifrados muchos años después.

El patriarca, José Arcadio Buendía, vuelve a encontrarse con el fantasma de Aguilar y enloquece. Entonces, la familia lo amarra a un árbol del patio trasero, donde morirá de un infarto.

II etapa: la guerra civil y el coronel Aureliano Buendía

Al estallar la guerra civil, Aureliano Buendía lucha contra los conservadores, comandando un grupo de soldados de Macondo. Al irse, nombra a su sobrino Arcadio como jefe civil y militar del pueblo.

Arcadio había sido el fruto de una relación extramarital entre José Arcado hijo y Pilar Ternera, regente de un prostíbulo. Fue criado en casa de sus abuelos a condición de que se le ocultara su origen. Cuando es nombrado jefe de Macondo, se convierte en un dictador y tiraniza el pueblo. Muere fusilado por los conservadores.

Durante su actividad como líder de los liberales, el coronel Aureliano Buendía enfrenta un total de 32 batallas, de las cuales sale siempre perdedor. Cansado, comprende que la lucha armada no tiene sentido.

Con el tiempo, Aureliano firma un tratado de paz, tras el cual intenta suicidarse. Regresa a Macondo, donde pasará el resto de su vida haciendo y rehaciendo pescaditos de oro.

Coronel Aureliano
Marco Cabras: Ilustración del coronel Aureliano Buendía en su retiro militar, haciendo y rehaciendo pescaditos de oro.

III etapa: la fiebre bananera

Aureliano concibe 17 hijos de madres diferentes. Uno de ellos, llamado Aureliano Triste, promueve el tren a Macondo, lo que activa el comercio y permite la llegada de inventos como el telégrafo y el cine. Esto atrae la inversión de un grupo extranjero en una plantación de bananos.

La plantación genera la ilusión de prosperidad del pueblo, pero una huelga de trabajadores hará que todo acabe en una auténtica masacre. Los inversionistas, luego de haber explotado el pueblo, se retiran con su dinero y Macondo vuelve a la pobreza.

A partir de ese momento, el pueblo sufre lluvias constantes por casi cinco años. Úrsula, la matriarca centenaria que ha cuidado de toda la familia, espera el fin de las lluvias para morir y descansar en paz.

Durante los últimos tiempos de Úrsula, nace Aureliano (Babilonia), el último descendiente de los Buendía. Aureliano es hijo natural de Meme y Mauricio Babilonia, un aprendiz de mecánico que siempre es perseguido por un enjambre de mariposas amarillas.

La religiosa y tiránica madre de Meme, Fernanda del Carpio, se opone a la relación. Por ello, saca a Mauricio del camino, manda a Meme a un convento, le quita al niño y lo cría haciéndole creer que ha sido encontrado en una canastilla.

IV etapa: el fin de Macondo

Pasan los años y poco a poco el pueblo se va vaciando. Aureliano Babilonia, que se caracterizaba por ser sabio, pasa la vida descifrando los pergaminos que había escrito Melquíades.

Entre tanto, su tía Amaranta Úrsula regresa de Europa, casada con Gastón. Sin saber de su parentesco, ambos se enamoran y ella queda embarazada.

Durante el parto, en el que ella muere, da a luz a un niño con cola de cerdo. Aureliano intenta buscar ayuda, pero al no encontrar más que a un cantinero, se emborracha y se queda dormido. Cuando despierta y regresa, el niño ha sido devorado por las hormigas.

Finalmente, Aureliano logrará descifrar los pergaminos de Melquíades: «porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra». Entonces, todo Macondo será arrasado y sepultado por un huracán.

Árbol genealógico de la familia Buendía

árbol genealógico de cien años de soledad

Análisis de Cien años de soledad

Lo real maravilloso

La novela Cien años de soledad es una de las obras más representativas del boom latinoamericano. Lo más llamativo de esta generación fue la propuesta del "realismo mágico", definido por Alejo Carpentier como "lo real maravilloso" en los siguientes términos:

(...) al estado bruto, latente, omnipresente en todo lo latinoamericano. Aquí lo insólito es cotidiano, siempre fue cotidiano.

La historia de esta novela relata una serie de sucesos insólitos, insospechados, pero ni el narrador ni los personajes se asombran ante estos sucesos. En el universo de la narración, lo maravilloso se comporta como parte de la realidad cotidiana, como algo que no requiere explicación.

Historia y mito, memoria y olvido

Cada uno de los hechos narrados en la novela se relaciona con una lectura sobre el tiempo histórico, sobre la construcción de la memoria y la inevitabilidad del olvido. El autor dialoga con la historia e identidad de su Colombia natal que es también una imagen donde América Latina puede reconocerse.

Macondo no es solo un pueblo, es la imagen de una familia que encierra toda suerte de mitos, prejuicios, anécdotas, valores, sueños y voluntades destinadas al olvido, a la transformación del tiempo. La intrahistoria de la familia Buendía es a la vez un reflejo de la infancia de García Márquez y a la Historia con mayúsculas.

Aracataca
Estación del tren de Aracataca, pueblo donde nació Gabriel García Márquez y que inspiró la novela.

En su Aracataca natal el escritor fue testigo del paso de la tradición a la modernidad. Pudo ver el enfrentamiento decimonónico entre liberales y conservadores, la llegada del tren, el auge de la fiebre del banano, la expansión del capitalismo y sus prácticas de dominación.

García Márquez también dialoga con los valores de una cultura atravesada por toda suerte de relatos míticos y religiosos que tienen un gran poder. Así, le da voz a las supersticiones y a las imágenes bíblicas del catolicismo, naturalizadas en el imaginario popular latinoamericano. De este modo, en la novela se pueden encontrar referencias al pecado original que espera su castigo, una asunción y un diluvio.

Con ello, el autor articula un discurso mítico, un relato lleno de símbolos que explica el origen y el fin de un microcosmos en el que se construye una imagen del mundo.

Los personajes y los arquetipos

Los nombres de los personajes en esta novela se repiten de generación a generación, prácticamente idénticos. Así, parecen actuar como seres que representan conceptos y estructuras de pensamiento que explican la condición humana, como suele suceder en los mitos griegos.

Además, García Márquez da un paso más allá cuando otorga nombres similares a cada personaje. Con este hecho, recalca el peso de la herencia, de la memoria, del mandato de los ancestros y de la cultura. De esta manera, están presentes la búsqueda del conocimiento, la fuerza militar, la religión, los prejuicios y el avance del capitalismo.

Los impulsivos y soñadores Arcadios, los retraídos y curiosos Aurelianos, las enérgicas pero supersticiosas Úrsulas o una Fernanda en extremo religiosa y tiránica, representan las fuerzas de la historia debatiéndose por predominar.

El amor y la historia

En cada relato de Cien años de soledad, en la historia de cada personaje y en la forma en que cada una se hila existe una fuerza que las anula a todas las demás: el amor. Aunque está presente a lo largo de toda la novela,sucumbe ante el peso de una cultura que condena a los Buendía a vivir cien años de soledad.

Ver también:

Biografía de Gabriel García Márquez

Gabriel García Márquez

Gabriel García Márquez nació el 6 de marzo de 1927 en Colombia, específicamente en el pueblo Aracataca. Debido a que sus padres se fueron en busca de mejores oportunidades económicas a Sucre, fue criado por sus abuelos y sus tías, de quienes escuchó muchas historias que inspiraron gran parte de su literatura, especialmente la novela Cien años de soledad.

Asistió a la Universidad Nacional en Bogotá, pero debido a su cierre tras el Bogotazo de 1948, García Márquez se trasladó a Cartagena para continuar sus estudios. Aunque nunca se graduó, se unió al Grupo de Barranquilla, en el que participaban importantes figuras de la escena cultural colombiana como José Félix Fuenmayor y Ramón Vinyes.

Ese mismo año el escritor inició su carrera como columnista, y a lo largo del tiempo trabajó para los diarios El Universal, El Heraldo de Barranquilla, El Espectador y para la revista Mito.

Vivió en el extranjero por algunos años, con breves estancias en diversos países como Francia, Polonia, Hungría, la República Democrática Alemana, Checoslovaquia, la Unión Soviética, Venezuela, Cuba y Estados Unidos. Finalmente, se estableció en México por muchos años y trabajó como guionista de cine y director de las publicaciones La familia y Sucesos.

Publicó su obra maestra Cien años de soledad en 1967, en pleno auge del boom latinoamericano. Esta novela se convirtió rápidamente en un éxito editorial insospechado. Ganó el premio Nobel de Literatura en el año 1982 y dio un discurso llamado "La soledad de América Latina".

Falleció en Ciudad de México el 7 de abril de 2014.

Obras más importantes de Gabriel García Márquez

Entre algunos de sus títulos más importantes, podemos mencionar los siguientes:

  • 1955.- La hojarasca
  • 1961.- El coronel no tiene quien le escriba
  • 1962.- La mala hora
  • 1967.- Cien años de soledad
  • 1970.- Relato de un náufrago
  • 1972.- La increíble y triste historia de la cándida Eréndira y de su abuela desalmada
  • 1975.- El otoño del patriarca
  • 1981.- Crónica de una muerte anunciada
  • 1985.- El amor en los tiempos del cólera
  • 1989.- El general en su laberinto
  • 1992.- Doce cuentos peregrinos
  • 1994.- Del amor y otros demonios
  • 2004.- Memoria de mis putas tristes
  • 2010.- Yo no vengo a decir un discurso

Primer capítulo de Cien años de soledad leído por Gabriel García Márquez

Vea también:

Catalina Arancibia Durán
Revisado por Catalina Arancibia Durán
Máster en Literatura Española e Hispanoamericana. Diplomada en Teoría y Crítica de Cine. Profesora de talleres literarios y correctora de estilo.
Andrea Imaginario
Editado por Andrea Imaginario
Profesora universitaria, cantante, licenciada en Artes (mención Promoción Cultural), con maestría en Literatura Comparada por la Universidad Central de Venezuela, y doctoranda en Historia en la Universidad Autónoma de Lisboa.